La risa tiene efectos preventivos en las personas diabéticas

lunes, 20 abril 2009
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Los diabéticos que se brindan una buena dosis diaria de risas y buen humor no sólo le hacen un favor a su estado de ánimo, también los ayuda a mejorar sus niveles de colesterol y a disminuir el riesgo cardiovascular.

"La risa puede ser una buena medicina", sonríe el autor del estudio, Lee Berk, especialista en atención preventiva y psocoinmunólogo en la Universidad de Loma Linda en California, "La risa puede llegar a ser tan valiosa como los medicamentos para la diabetes", insiste.
Berk está presentando sus ideas antes sus colegas, durante la reunión anual de la American Physiological Society, en EE.UU.
Berk y su colega, el Dr. Stanley Tan, un endocrinólogo especialista en diabetes y Roble de Crest del Instituto de Investigación en Salud en Loma Linda, trabajó con 20 adultos que sufren de diabetes tipo 2, y tenían un promedio de 50 años de edad, y con un grupo de control para evaluar los efectos de la risa.
Todos tenían registros de presión arterial elevada y colesterol alto. Y ambos grupos estaban tomando medicamentos para la diabetes, la presión arterial alta y drogas para bajar el colesterol.
El grupo de la risa recibió instrucciones para leer diversos contenidos humorísticos al menos 30 minutos en forma diaria, especialmente lo que ellos mismos encontraran humorístico o divertido, generalmente comedias de televisión o películas divertidas.
Después de 12 meses, los investigadores evaluaron a los dos grupos con pruebas especiales para medir el colesterol y los niveles de proteína C-reactiva, un marcador de inflamación que está asociado con enfermedades del corazón.
El grupo de la risa registró un aumento en el colesterol bueno (HDL) del 26%, en comparación con un 3 % de aumento en el colesterol bueno del grupo de control, dijo Berk.
¿Cuál es el secreto? Según Berk "con la risa y el buen humor se logra disminuir las generación de moléculas químicas negativas propias del cuerpo.
Los resultados no ha constituido una gran sorpresa para algunos terapeutas que ya han empleado el humor para ayudar a tratar sus pacientes con diabetes. Y, además, está creciendo el cuerpo de evidencias médicas sobre el del humor como terapia en la diabetes.
"Hay un creciente conjunto de pruebas que afirman el valor del humor cuando se trata la diabetes", asegura Garnero.
Como afirma Sue McLaughlin, directiva de la American Diabetes Association: "Es alentador saber que algo como la risa, que es gratuita y puede ser compartida, tiene efectos beneficiosos sobre el bienestar de una enfermedad crónica que afecta a millones de personas en todo el mundo".
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